strikethrough Empoderar, No Dominar

Del Capítulo 6: Cambio de mentalidad #1 - Los jóvenes son líderes HOY, no solo mañana

2 MINUTOS DE LECTURA

Cada vez que ingreses a una sala llena de jóvenes, respira profundamente y dite a ti mismo: ¡empodera, no domines!

He estado en demasiadas salas con demasiados jóvenes y he visto los efectos de una sala dominada.

Una vez estaba con 20 líderes juveniles. Una visitante famosa pasó por nuestra habitación cuando salía de la oficina. En el momento en que entró, la atmósfera en la habitación cambió. En serio.

Esta dignataria, emocionada por el sonido de su propia voz, arrulló a la multitud sobre sus logros. No había contribuyente en la habitación excepto ella. Ella hizo las preguntas y respondió a sus propias preguntas. Ella era la coma, el punto y coma, las comillas y el punto final. Finalmente, se fue con la rapidez de una mujer que llega tarde a su propia coronación.

¿Y los jóvenes? Bueno, parecían peces temporalmente cansados del agua, hasta que ella salió de la habitación. ¡Y volvieron a nadar!

¿Lección para todos nosotros? ¡Nunca succiones el oxígeno de una habitación! ¡Nunca domines una habitación! Cubre esa brecha generacional con cuidado.

En lugar de colocar una alfombra roja para que camines, coloca un puente y deja que los jóvenes caminen hacia ti.

Empodera la habitación. Eso lo logras haciéndoles preguntas. Conócelos mejor. Extrae sus pensamientos. Descubre cuáles son sus sueños. Ve si puedes hacer realidad ese sueño.

Deja de imponerles nuestra armadura del tamaño de un hombre grande. En cambio, que nos hablen de sus cinco piedras y una honda. Que nos cuenten sobre el león y el oso que mataron. Que nos cuenten las canciones que escribieron mientras convertían un desierto en un manantial. Convéncelos para que compartan con nosotros cómo salen del patio trasero al área del frente cuando el profeta está listo para ungir al próximo rey.

Créanme, los jóvenes nos dejarán dominar una habitación porque los jóvenes pueden ser muy educados. Nos dejarán ser los más brillantes de la sala. Pero cuando salgamos, seremos los que más tenemos que perder. Habríamos perdido una oportunidad de oro para escuchar lo que está vibrando con la generación actual. Habríamos perdido la oportunidad de encontrar líderes. Habríamos perdido el momento de empoderar a la próxima generación de cambiadores del mundo.

En otras palabras, nos hubiéramos perdido de ver al próximo rey ungido.
No solo invita a los jóvenes a la fiesta, dales un asiento en la mesa.

Consigue el libro

Citas compartibles